Los presidentes de estas organizaciones colegiales han redactado un manifiesto en el que piden una regulación adecuada de la publicidad sanitaria que garantice que los mensajes y la información que se difundan atiendan a criterios estrictamente clínicos y sanitario
Para evitar confundir al ciudadano, la publicidad sanitaria debe ser rigurosa, veraz, prudente y comprensible, basada en la ética y la evidencia científica